La Hermandad del Silencio va perfilando todos los detalles del regreso a Almería de su imagen titular. En las últimas semanas varios miembros de la Hermandad han trabajado en la reforma de la capilla de Nuestra Señora del Consuelo en la parroquia de San Agustín.
Entre las novedades destaca la nueva configuración del altar de la imagen, confeccionado con elementos del paso del Cristo de la Columna, dispuestos de forma diferente a como estaban montados hasta ahora, consiguiendo un conjunto que recuerda más al histórico paso y que resulta más elegante y estilizado. Además, se ha instalado un pequeño dosel que enmarcará la imagen de la Virgen, ocultando el vano en el muro de los pies de la iglesia y eliminando la vidriera que lo adornaba en los últimos años. A ambos lados del dosel se sitúan dos pequeñas cornucopias y en las paredes laterales -ya sin el zócalo de azulejos- se han colocado dos cartelas del mismo paso aludido, que ostentan medallones con pinturas al óleo obra de la artista almeriense Ana María López Amate.
Sólo resta la colocación de una peana y de la cancela con los varales de bronce del antiguo paso del Consuelo. La nueva configuración del altar permitirá una visión más cercana de tan hermosa imagen mariana, pues estará situada a menos altura que anteriormente, unos cincuenta centímetros aproximadamente.
Entre las novedades destaca la nueva configuración del altar de la imagen, confeccionado con elementos del paso del Cristo de la Columna, dispuestos de forma diferente a como estaban montados hasta ahora, consiguiendo un conjunto que recuerda más al histórico paso y que resulta más elegante y estilizado. Además, se ha instalado un pequeño dosel que enmarcará la imagen de la Virgen, ocultando el vano en el muro de los pies de la iglesia y eliminando la vidriera que lo adornaba en los últimos años. A ambos lados del dosel se sitúan dos pequeñas cornucopias y en las paredes laterales -ya sin el zócalo de azulejos- se han colocado dos cartelas del mismo paso aludido, que ostentan medallones con pinturas al óleo obra de la artista almeriense Ana María López Amate.
Sólo resta la colocación de una peana y de la cancela con los varales de bronce del antiguo paso del Consuelo. La nueva configuración del altar permitirá una visión más cercana de tan hermosa imagen mariana, pues estará situada a menos altura que anteriormente, unos cincuenta centímetros aproximadamente.
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